Una maleta vintage diy.

 

Hola de nuevo a todos!!!

Para terminar la semanita, os voy a enseñar uno de mis últimos proyectos diy de scrap que he hecho.

Hace unos días fue el cumpleaños de mi abuela, una gran lectora, y probablemente una de las personas a las que le debo mi devoción a los libros. Mi madre, se acordaba de unos libros que leía mi abuela cuando era poco más que una chiquilla, y que les tenía un cariño especial, pero que a día de hoy son casi imposibles de encontrar. En la última visita de mis padres a Madrid, dieron con una librería muy antigua, que cosas de la vida, tiene almacenados en su biblioteca “pequeños tesoros” descatalogados. Entre ellos, estaban algunos  de esos libros, de los que mi abuela había disfrutado junto con sus amigas largas tardes de lectura.

Tras hacernos con un pequeño arsenal de ellos, queríamos que el packaging fuese un poquito especial. Es ahí donde entro en acción. Ojeando los libros, vi que muchos entrañaban viajes y evocaban lugares lejanos, y como toda lectura, al fin y al cabo es como un viaje, se me ocurrió que el packaging fuese una maleta. Una maleta antigua-vintage-, que hubiese recorrido muchos kilómetros y que escondiera un sin fin de aventuras y recuerdos.

Manos a la obra.

Materiales: maleta de cartón (de holamama), papel decorativo scrap (Doble A de Scrap), cinta de tela,

“Destinations stickers” (de Cavallini & Co.), cordel kraft, papel kraft, cola, tijeras, cinta de doble cara.

Lo primero que hice para decorar la maleta, fue colocarle unas cintas de tela de arpillera (de saco), emulando a las correas que tenían las maletas para atarlas. Para pegarlas utilicé cinta de doble cara.

Colocadas las tiras, empecé con la decoración de la maleta. Tengo una caja de Cavallini & Co. con pegatinas de estética vintage y con motivos viajeros, que no me podían ir mejor. Todavía no las había utilizado y me moría de ganas por hacerlo y la ocasión lo merecía.

En una de mis visitas a Doble A de Scrap, me había hecho con unos cuantos papeles de scrap con motivos viajeros, que también me venían genial. Recorté las piezas que me encajaban con el diseño que estaba haciendo y las pegué con cinta de doble cara.

Toda maleta que se precie, necesita una etiqueta de identificación, y ésta también iba a tener la suya. Para hacerla, imprimí en papel kraft la leyenda “La mejor abuela del mundo” (como para cada uno, su abuela es la mejor del mundo, mundial, y la mía lo es). Con ayuda de otra etiqueta que tenía en casa dibuje la silueta sobre la leyenda y recorté.

Para hacerla un poquito más especial, cosí los bordes. Me ayudé de un aparato que marca los puntos por donde tienes que pasar la aguja, y cosí con baker’s twine rojo (era la primera vez que cosía en papel, tengo que mejorar la técnica, pero estoy en ello).

Para finalizar, decoré el asa de la maleta con cordel kraft, pegándolo con cola blanca.

Ya solo quedaba meter los libros…

Et voilà, ya tenía mi maleta vintage lista para su destinataria!

¡Espero que os haya gustado!

Que paséis un fantástico fin de semana, y disfrutéis de este “veroño” que tenemos. Hasta el próximo post!!!